jueves, 2 de octubre de 2008

Las tres (o más) condiciones que casi nunca cumplen los juegos

Hay aspectos prácticos de los juegos de mesa que acostumbran a ser ignorados por los editores que, sin embargo, a los jugadores habituales nos afectan. Estoy olvidando a propósito cuestiones económicas y comerciales, y hablando sólo desde el punto de vista del jugador que quiere, egoístamente, el producto que mejor responda a sus necesidades.

Entre todos ellos, hay tres que creo que son los principales:

1. Tamaño de las cartas

Las cartas son de los elementos de un juego que más sufren. Se barajan una y otra vez, se ponen sobre la mesa y se recogen. Reciben el sudor de las manos que las sostienen, pueden acabar con manchas de aceite si se come mientras se juega. Los jugadores poco cuidadosos acostumbran a doblarlas...

La solución a esto es sencilla y barata: fundas de plástico.

Sin embargo, parece existir algún tipo de conjura, porque la excepción es encontrar juegos con las cartas del tamaño adecuado para ser enfundadas. O son muy grandes, y no caben; o son muy pequeñas, y bailan dentro de las fundas.

¿Tanto cuesta usar el tamaño estándar?

Por supuesto, hay casos en los que ese tamaño no se puede usar porque no resultaría práctico: si las cartas de investigador en Arkham Horror fueran de tamaño funda haría falta un estadio para desplegar el juego.

2. Tamaño de la caja

Queremos comprar un juego, no una caja conteniendo aire.

Comprendo la estandarización de tamaños, que una caja más grande permite un precio mayor, que luce más en la estantería de la tienda... pero cuando un juego podría caber en una caja cuatro veces más pequeña...

Un ejemplo: en la caja de Ave Caesar he llegado a hacer caber:

  • el propio Ave Caesar
  • Pandemic
  • That's Life
  • Sushizock im Gockelwok
  • Volle Wolle
3. Ayudas de juego y resúmenes de reglas

La BSK y el BGG están llenos de ayudas de juego y de resúmenes de reglas. En muchos juegos son un elemento imprescindible, sin el cual se hace incómodo explicar y jugar el juego, porque hay que estar continuamente remitiéndose a un reglamento que está pensado para enseñar a jugar, no para servir de consulta durante la partida.

Como en el punto 1, lo normal es que no se incluyan estos elementos y en los casos excepcionales en que sí se ha hecho su utilidad acostumbra a ser limitada.

Y más...

¿Se os ocurre alguna más?

Actualización: Añado algunas de las sugerencias fruto de los comentarios.

4. Bolsas de autocierre

Pocas cosas son más comunes y baratas que una bolsa con autocierre, y sin embargo acostumbran a ser difíciles de encontrar. En los supermercados se pueden encontrar bolsas para congelar alimentos, pero acostumbran a ser demasiado grandes y muchas tienen motivos dibujados... y no queda muy serio guardar las fichas de daño en una bolsa con tomates dibujados.

Para guardar los componentes de un juego, evitar que se pierdan y se muevan durante el transporte son la solución idónea. Pero pocos, poquísimos juegos las incluyen.

5. Cubetas útiles

La cubeta es la parte de la caja, ya sea de plástico o cartón, destinada a contener los componentes del juego una vez destroquelados. Algunas son minimalistas, otras tienen un compartimento para cada componente, otras son genéricas y no hay manera de entender dónde va cada cosa. Algunas son útiles sólo si el juego no se va a transportar o se va a almacenar horizontalmente (como la de Elasund, que a la que se pone la caja de lado se sale todo de sitio).

Además, poquísimas veces se ha pensado en dejar el espacio suficiente para guardar las cartas enfundadas (de hecho, ahora mismo no se me ocurre ningún ejemplo).

Creo que entre una cubeta inútil y una caja sin cubeta pero que incluya de serie las bolsas con autocierre para guardar los componentes, todos nos decantaríamos por la segunda opción.

6 comentarios:

  1. - Bolsitas zip para guardar las fichas del juego y evitar pérdidas, ¡no encarecen mucho y quedas bien¡
    - Servicios postventa, como reposición de piezas perdidas o deterioradas.
    - Alguna explicación/historieta sobre el origen del juego, propósito, anecdotario de la edición, etc. que nos haga el juego "más humano"

    ResponderEliminar
  2. - El interior de la caja preparado realmente para meter despues sus componentes, (ya que en muchos casos tienes que tirar el plastico para meter las cosas. ej. Shogun).

    - Y las bolzas zip, eso es perfecto. Un bravo a homoludicus por ello.

    - Si hay un hueco para las cartas, que piensen que les podemos poner fundas, que luego no caben.

    - Unas cajitas para las cartas, y no tener que hacernoslo nosotros.

    ResponderEliminar
  3. Fran. Habre un tema en la BSK, que me parece muy interesante.
    Creo que por lo que ha mi concierne puedo tomar buenas ideas y hacer cosas que aveces no cuestan casi nada y se peuden aplicar. Aunque siempre el gran enemigo es el tiempo y el prespuesto.

    Saludos
    ACV

    ResponderEliminar
  4. Gracias por los comentarios. Ya he incluido algunos de ellos en el artículo.

    ACV, hecho, acabo de abrir el tema en La BSK.

    Gracias a todos y un saludo.

    ResponderEliminar
  5. Hola, Fran. Lo del tamaño de las cajas es peliagudo, por una cuestión. Al consumidor de a pie, si le das el juego en una caja pequeña, no le impresiona. Una caja grande ocupa mucho espacio en una estantería de una juguetería, con lo que llama más la atención. En la tienda especializada eso no es problema -suelen ser pequeñas- pero cuando el pobre comercial de la editoriald de turno se va a ver al señor Carrefour o al señor Corte Inglés, una caja pequeña le quita puntos.

    ResponderEliminar
  6. ¡Hola, Mar!

    Ya sé que lo del tamaño de las cajas es una batalla perdida... pero por quejarme que no quede. Llegará el día que tendré que elegir entre tener juego o tener cajas, y empezaré a tirar cajas, o a cortarles las esquinas para poderlas guardar plegadas en plano. (Algo que ya he leído que hacen algunos coleccionistas con problemas de espacio). Aunque sé que si ese día llega... dolerá.

    Un saludo.

    ResponderEliminar

Related Posts with Thumbnails