Primera quedada de besekeros en Barcelona
No soy muy partidario de explicar ni de leer sesiones de juego en las bitácoras (salvo contadas excepciones, tampoco leo las sesiones del BoardGameGeek) porque no me interesa leer sobre partidas que ha jugado gente que no conozco.
Sin embargo voy a hacer una excepción, porque este viernes, en Barcelona, la magia de los juegos de tablero permitió que cinco personas, que en otras circunstancias seguramente jamás hubiéramos coincidido, nos conociéramos y disfrutásemos de unas cuantas partidas durante lo que fueron unas entretenidas y divertidas siete horas.
Ciertamente el conocer gente por Internet tiene sus peligros, pero teniendo un poco de cabeza y cuidado y gracias a las aficiones compartidas se puede llegar a conocer a personas de lo más agradable.
Después de unos cuantos mensajes en la BSK nos pusimos de acuerdo en quedar en el bar Queimada de Barcelona. Allí nos encontramos en primer lugar Blackbear, WasQ y un servidor.
Geschenkt y Coloretto
Mientras esperábamos la llegada de más gente, disfrutamos de unas partidas de Geschenkt y Coloretto. Son dos "fillers", juegos de relleno, pequeños, fáciles de explicar y rápidos de jugar, ambos con un componente importante de "push your luck"; algo que a mí, personalmente, siempre me atrae en un juego.
Kremlin
Al cabo de una hora llegó Pensator, y entonces ya nos planteamos una partida a uno de los pesos pesados de la tarde: Kremlin, un juego de 1988, en edición de Avalon Hill, aunque diseñado por un alemán (es que no hay manera de salirse del tema).
En Kremlin el objetivo de los jugadores es controlar a los políticos del Politburó soviético y conseguir que el jefe del partido bajo su control salude tres veces desde la tribuna durante el desfile de octubre. Los diferentes políticos se organizan en una estructura piramidal sobre el tablero y los jugadores van gastando puntos de influencia sobre ellos para controlarlos y usar las atribuciones que les da el cargo político que ocupan. Sin embargo, cuanto más tenga que trabajar un político, mayor será el estrés que sufrirá lo que le ocasionará un envejecimiento prematuro y mayores posibilidades de morir.
Aquí se puede ver la estructura del politburó. En lo alto el jefe del partido, en las dos filas por debajo de él los ministros y más abajo aún los futuros candidatos a ocupar las futuras vacantes.
Kremlin es un juego curioso: por un lado se le notan los años, pero por otro es realmente original, divertido de jugar y aún válido. Quizá lo que más me gustó es que no hay un orden de juego estricto. El turno se resuelve siguiendo un orden de fases, pero dentro de éstas es la influencia que se ha jugado sobre los políticos la que determina quién y cómo podrá actuar. Otro aspecto que me gustó fue el uso del dado, que aporta mucha emoción al juego: una mala tirada puede mandar a la tumba al político sobre el que hemos depositado más influencia, así que más vale tratarlo con el máximo cuidado… sin que los demás jugadores lo noten.
Puerto Rico
Justo cuando la partida de Kremlin estaba acabando, llegó Quinto Elemento, que, haciendo honor a su apodo, se convirtió en el quinto jugador de la velada.
Se impuso un alto para recuperar fuerzas, bocadillo mediante, y continuamos con un Puerto Rico.
A estas alturas nada nuevo se puede decir de Puerto Rico, así que no comentaré nada sobre él. Era la primera partida de este juego para Blackbear, Quinto Elemento y Pensator y tuvo sobre ellos el efecto que era de esperar: en un principio les abrumó, no por su dificultad sino por la complejidad de coordinar todos sus pequeños detalles, pero les acabó fascinando. Y Quinto Elemento acabó ganando la partida con unos más que muy respetables 47 puntos.
Puntuaciones finales de la partida. Desde luego no fue mi mejor partida de Puerto Rico, la estrategia del añil (si es merece ese nombre) no funcionó... Foto cortesía de Bascu.
Bohnanza
Acabamos con un Bohnanza, que no dio tiempo a terminar porque algunos, esclavos de los horarios del transporte público, nos tuvimos que escapar corriendo a coger el metro.
La explicación de las reglas propició uno de los mejores chistes de la sesión, que no repetiré aquí por su absoluta incorrección política y para evitar herir susceptibilidades.
Despedida y cierre
Unos compañeros de juego fantásticos, abiertos a cualquier tipo de juego, un lugar agradable, una atención y amabilidad inmejorable por parte de los dueños del bar. Todos ellos elementos de una primera quedada en Barcelona de besekeros locos por los juegos de mesa que nos dejó tan buen sabor de boca que, nada más acabarla, ya estábamos hablando de cuándo celebrar la próxima.
Habrá más, seguro. Así que si eres de Barcelona o cercanías, y te apetece conocer gente para jugar, pásate por la BSK, que desde allí coordinaremos las próximas quedadas.
Holas,
ResponderEliminarMuy buena la crónica, da cierta envidia ;-). Aquí en Sevilla llevamos tiempo sin poder quedar como lo hacíamos.
Echo de menos poder veros las caras. Yo es que soy muy curioso para eso de verle el careto a la gente. Con el icono de la taza de café no me hago una idea clara!
Una cosa que me parece muy curiosa. Ya me ha ocurrido varias veces que en la primera partida de alguien, gana al PR. Igual que en vuestra sesión. Y eso que yo diría que es un juego en el que la experiencia cuenta mucho...
Saludos,
Javi
Hola Javier,
ResponderEliminarPues debo confesar que esta quedada nació de la envidia a las de Madrid. Me ponía los dientes largos ver lo bien que se lo estaban pasando en Madrid, así que me decidí a intentar conseguir lo mismo en Barcelona. Y así ha sido. Aunque el mérito no es mío, sino de todos los que fuimos, y, por supuesto, de la BSK, que nos ha permitido encontrarnos.
Sobre lo del Puerto Rico hay varias teorías. Una es que WasQ y yo nos dejamos ganar a propósito, para hacerles pedir una nueva partida y darles para el pelo. Pero no, en serio, Quinto Elemento jugó muy bien, y su victoria fue muy merecida.
¡Ah! ¡Tu no te dejaste ganar? Pues menuda partida tan cutre tío.
ResponderEliminarDesde luego el Queimada es un lugar maravilloso. Vamos, no pasa siempre que te den las gracias por ocupar la mesa de un bar siete horas seguidas. ¡Chapó! Para los dueños
Jolas;
ResponderEliminarSoy la hija de Valentín (el dueño del Queimada). Estoy descubriendo un montón de comentarios y links de gente que ha pasado por el bar y de personas que ya son asiduas, es muy gratificante! Lo cierto es que mi padre no sabe que hay mucha gente que escribe sobre su experiencia en el Queimada, así que le compré un ordenador con conexión para que se pusiera al día.
Bueno, en ello está. Ahora a través del correo queidrac@hotmail.com podéis hacer sugerencias, peticiones y lo que os venga en gusto (estamos en fase de explicarle cómo funciona el rollo correo y tal). También estamos pensando en hacer Web del bar, por el momento debemos conformarnos con el espacio que proporciona Hotmail a través del correo: queidrac.spaces.live.com, donde vamos a poner lista de juegos vigentes, lista de juegos por poner, lista de juegos descatalogados pero que aún se conservan, horarios, comidas, y un largo etc que poco a poco vamos a ir construyendo.
Gracias a todos por los comentarios, links y en resumen alusiones al Bar Queimada. Os compensaremos!! ;)
Hola Ruth:
ResponderEliminarGracias al Queimada por ese lugar que todas las semanas nos acoge para jugar unas partidas en el mejor ambiente.
En lo que os podamos ayudar no dudéis en decírnoslo.
Un saludo.